Bill Gates (28 de octubre de 1955 – )
Fundador y asesor técnico de Microsoft
Rutina diaria y filosofía sobre el dinero
Bill Gates no es solo un empresario de TI común, sino también un filántropo global, un transmisor de conocimiento y un símbolo universal de la riqueza. Como cofundador de Microsoft, ayudó a difundir las computadoras por todo el mundo. Hoy, a través de la Fundación Bill y Melinda Gates, contribuye enormemente al desarrollo de vacunas, la prevención de enfermedades y la reforma educativa, entre muchas otras áreas públicas.
Su rutina diaria se centra más en la “concentración” que en la “eficiencia.” Se levanta temprano, comienza el día con ejercicio y, en lugar de planificar cada hora, prefiere elegir un solo problema importante en el que concentrarse por completo durante el día. Dice que la lectura es el momento más sagrado y valioso del día, y dedica tiempo a ampliar su visión del mundo a través de los libros. De hecho, Gates lee más de 50 libros al año y publica su lista anual de “libros recomendados por Gates,” lo que muestra cuánto valora la lectura en su vida.
Su filosofía sobre el dinero es muy clara: “La riqueza es una responsabilidad.” Incluso después de acumular una enorme fortuna, sigue viviendo de manera modesta y decidió devolver la mayor parte de su riqueza a la sociedad. Junto a Warren Buffett, inició la Giving Pledge, que alienta a los multimillonarios a donar la mayoría de sus activos a causas benéficas. Él mismo ya ha donado más de la mitad de su fortuna a su fundación. Gates considera el dinero no como un medio para satisfacer deseos personales, sino como una palanca para mejorar el mundo.
Comidas favoritas y los valores reflejados en sus hábitos alimenticios
Bill Gates está muy lejos de ser un amante de la buena comida. Sus hábitos alimenticios, revelados en entrevistas y documentales, son sorprendentemente simples y prácticos. Es famoso por disfrutar de las hamburguesas con queso y la Coca-Cola Light, y a menudo se le ve comprando desayuno en McDonald’s, a veces incluso llevando un vaso con monedas en lugar de una billetera.
(Sus hábitos alimenticios y su forma de pensar son sorprendentemente similares a los de Warren Buffett.)
Pero detrás de esa simplicidad hay una filosofía importante. Gates dijo una vez: “Quiero gastar más energía resolviendo problemas que en la comida.” En lugar de usar la comida para satisfacer emociones, consume solo la cantidad de nutrición y energía que necesita, y dedica el resto de su atención a actividades intelectuales. ¿Será la frugalidad una forma de disciplina?
También considera las comidas no como eventos sociales, sino como espacios de intercambio de conocimiento. Incluso cuando comparte comidas con figuras como el expresidente Obama o Warren Buffett, las conversaciones giran siempre en torno a los “problemas del futuro.” Para Gates, las comidas son momentos de recargar energía física y, al mismo tiempo, de compartir sabiduría e ideas.
(Para los modernos amantes de la gastronomía, esta actitud puede parecer casi ascética. Pero tal vez la verdadera humildad y simplicidad estén en esa moderación.)
Filosofía del amor y las relaciones humanas
Bill Gates compartió 27 años de matrimonio con su exesposa Melinda French Gates, y durante ese tiempo administraron juntos su fundación, contribuyendo en gran medida a la salud global, la educación y el empoderamiento de las mujeres.
La noticia de su divorcio conmocionó al mundo, pero incluso después de separarse, continuaron colaborando en sus proyectos filantrópicos. Gates ve el amor como “un espacio de respeto mutuo y crecimiento.” Aunque no es alguien que exprese sus emociones abiertamente, ha dicho en varias ocasiones que su pareja lo ayudó a convertirse en una mejor persona. Melinda, por su parte, es reconocida por haberle inculcado el equilibrio, la empatía y el sentido de responsabilidad social.
Su relación con sus hijos también es particular. Declaró públicamente que no les dejará una gran herencia, sino que prefiere guiarlos hacia una vida independiente y con propósito. Su filosofía es clara:
“Puedo darte una buena educación y abrirte las puertas de la oportunidad, pero la vida que sigue depende de ti.”
Una declaración que refleja un amor basado en la confianza y la sabiduría.
Lecciones que los modernos pueden aprender
Bill Gates es descrito como una persona extraordinaria que logró resultados notables con una inteligencia y gestión del tiempo aparentemente comunes. Cree que no es la creatividad genial, sino la capacidad constante de resolver problemas y el pensamiento profundo lo que puede cambiar una vida. Una de sus frases más memorables es:
“Las personas sobrestiman lo que pueden hacer en un año y subestiman lo que pueden lograr en diez.”
Esta cita subraya la importancia del esfuerzo constante y a largo plazo. Gates enfatiza que más importante que los resultados inmediatos son los hábitos que ahorran tiempo, los estándares para confiar en la información y el coraje para reflexionar sobre los fracasos.
Lo que podemos aprender de Gates no es solo la acumulación de riqueza, sino la esencia de vivir en la era de la información: qué creer, cómo pensar y dónde invertir nuestro tiempo.
Incluso para Bill Gates, un día tiene solo 24 horas — igual que para nosotros.
¿Cómo pasé mis 24 horas hoy, y con qué actitud y propósito?